Nos acercamos al fin del año 2009, y el momento parece apropiado para pensar en lo que hemos recorrido en el año y casi un mes desde que el 6 de diciembre de 2008 comenzamos nuestra labor.
Pero… ¿cómo evaluar lo hecho?
Podemos decir que han sido 56 sábados en que hemos estado presentes, con calor y con frío, con lluvia o con el humode un incendie en el campo lindante al predio de la Comisión.
Podemos decir que hemos ido a jugar a Sauce, con la gente del Taller Chaturanga, a La Proa, a Isotécnica, y comentar de trofeos y medallas conseguidos en estos lugares. Podemos decir que Marcos Britos primero, y Diego Costa luego han conseguido resultados que les permiten ahora engrosar el número de jugadores con ELO en el ajedrez nacional.
Podemos hablar de los amigos que hemos recibido, en ocasión de los dos Torneos de Ajedrez Activo realizados, en Junio y en Diciembre.
Podemos contar de cómo el nivel de juego de los que hace tiempo vienen concurriendo ha ido mejorando, incluyendo la realización de un Torneo Pensado Interno (no oficial).
Podemos expresar el agradecimiento a los que nos han apoyado desde dentro del ajedrez, pero también desde fuera de él. A el Grupo de Ajedrez La Proa, al Taller de Ajedrez Chaturanga, a Los Trebejos de Walter Estrada, a Miguel Llabrés, a Pedro Lamas, a José Riverol, a Horacio Arévalo y a todos los que colaboraron comprando las rifas con que hemos ido resolviendo distintos gastos. A la Comisión de Fomento del Barrio los Bulevares, al SOCAT local, al MIDES, a Isotécnica, a Coetc, y a los padres y amigos que nos han acompañado.
Pero sobre todo queremos nombrar a cada uno de los que han venido a jugar con nosotros en algún momento, a los que han perseverado tanto omo a los que no regresaron.
Y nos acordamos entonces de :
Sin mencionar a los amigos que nos acompañaron en los Torneos de Ajedrez Activo. Un total de 76 personas que han pasado por nuestro espacio.
Ahora tenemos que seguir mirando adelante, hacia el 2010, que será el último año de la primera década del siglo.
Seguiremos Avanzando, cómo el peón que continúa hasta llegar a la octava columna donde logra dar su salto cualitativo.